Herodes el Grande

(Mateo 2:1-22; Lucas 1:5; Hechos 23:35)

El hijo de Antípatro el Idumeo y Cipras, un Arabe de descendencia noble.

En el año 47 A.C. Julio César designó a Antípatro como "astuto Idumaean," procurador de Judea, quien dividió sus territorios entre sus 4 hijos, Galilea le tocó a Herodes, quien fue luego designado tetrarca (N.T.: definido en el Diccionario M.W. como gobernador de una cuarta parte de un territorio) de Judea por Marco Antonio (40 A.C.) y como Rey de Judea por el Senado Romano.

El era de carácter duro y cruel. "El era bruto y un extraño a todo humanidad". Alarmado por la noticia del nacimiento “del nuevo Rey de los Judios” que cambiaría las circunstancias, el dio las órdenes de "degollar a todos los niños en Belén, y en toda la costa, que no hayan cumplido los 2 años" (Mateo 2:16). A el le gustaba el esplendor y gastaba grandes sumas de dinero en reconstruir y adornar las ciudades de su imperio. El reconstruyó la ciudad de Cesárea(v.q.) en la costa, así como también la ciudad de Samaria (v.q.), quien el llamó Sebastia (N.T.: conocida como Samaria), en honor a Augusto. El restauró el Templo de Jerusalén que estaba en ruinas, una labor que se inició en el año 20 A.C., y no fue terminado hasta la muerte de Herodes, probablemente alrededor del año 50 D.C. (Juan 2:20). Luego de un conflictivo reinado que duró 37 años, el murió en Jericó sufriendo de grandes agonías, de cuerpo y de mente, en el año 4 A.C., de acuerdo con la cronología, común, en el mismo año en que Jesús nació.

Luego de su muerte su reino fue dividido entre sus 3 hijos. A Felipe le fue asignado el territorio al Este del Jordán, entre las Provincias de Cesárea de Filipo y Betábara, A Antipaz se le asignó Galilea y Perea, mientras que a Arquelao se le dio las tierras de Judea y Samaria.